Como parte del estudio económico-ambiental del proyecto ECOGRANULARWATER, se pasó un cuestionario entre la población de Torre Cardela. El trabajo de campo se realizó entre los meses de diciembre de 2018 y enero de 2019. La persona encargada de entrevistar a la población se pasó por todas las viviendas del municipio. Sobre una población de 759 habitantes, se recogió información de 468 residentes.
El cuestionario presentaba varios bloques de preguntas. Se pretendía captar información de los siguientes temas: sensibilidad medioambiental; percepción del servicio de agua –calidad del agua y precio del agua–; disposición al pago para contribuir a la sostenibilidad financiera del servicio municipal; y características socioeconómicas de los entrevistados.
Mostramos a continuación algunos de los resultados del cuestionario:
- Entre 0 y 10, la puntuación que hacen los residentes de la calidad del agua que actualmente sale por el grifo es algo superior a 5. No obstante, llama la atención que existe una elevada dispersión en la respuesta, se aprecian percepciones muy polarizadas según el entrevistado. Entre las distintas características organolépticas del agua de grifo, el aspecto peor valorado es el sabor. Un 15% de los entrevistados respondieron que el agua tiene un sabor poco agradable siempre o casi siempre. Además, otro 27% de los entrevistados respondió que el agua tiene un sabor poco agradable con cierta frecuencia.
- Como consecuencia de lo anterior, un elevado porcentaje de la población opta por aplicar alguna medida en el hogar. Mientras que el 43% de los entrevistados beben agua directamente del grifo, el 26% filtra el agua antes de ingerirla y el 31% opta por comprar agua embotellada.
- En cualquier caso, sí coincide la mayoría de los entrevistados en que la calidad percibida del agua mejoró con la nueva planta de ósmosis inversa. El ciudadano percibe que la característica en que más se notó la mejora fue la turbidez, pero también ha mejorado la percepción sobre el olor y el gusto del agua de grifo. Paradójicamente, un 50% de los entrevistados respondió que antes de la actual planta tomaba agua directamente del grifo, algo superior al dato actual. Entre la población que tomaba medidas en el hogar, antes era más elevado el porcentaje de población que bebía el agua embotellada.
- Aunque la población manifestó, de manera generalizada, ser consciente de la importancia de acceder a agua de calidad, solo en torno al 20% de los encuestados declaró tener idea sobre las consecuencias de beber agua con alto contenido en nitratos. En este orden de ideas, tan solo el 6% de los encuestados es consciente de que hace unos años el agua fue declarada no apta para consumo. Entre las pocas personas que responden por la causa de que el agua se declarara no apta, la mayoría responde que nitratos.
- Aunque se informó a la población de que los ingresos por el servicio de agua están lejos de cubrir los costes totales del servicio, tan solo el 29% de los encuestados mostró disposición a pagar un mayor importe por el recibo del agua. La respuesta es coherente, si tenemos en cuenta que, considerando el recibo trimestral que llega a sus casas, solo el 28% de los entrevistados piensan que el agua es barata o muy barata. De hecho, la mayoría de quienes respondieron que no estarían dispuestos a pagar más por el agua manifestaron no tener suficiente capacidad de pago. En segundo lugar, quienes no manifestaron disposición a pagar más por el agua, alegaron que tienen derecho a recibir un buen servicio sin tener que pagar más en el recibo trimestral. Parte de la población también manifestó que el servicio de aguas debe mantenerse subvencionado. Finalmente, con una frecuencia menor, también hubo quien respondió que en caso de hacer un pago adicional, el dinero sería malgastado o destinado a otra partida distinta al servicio de agua.
En los próximos meses analizaremos los datos con mayor profundidad. Los resultados obtenidos permitirán emitir conclusiones y recomendaciones de interés para la gestión municipal del servicio de agua.